13 Feb 2025
El Banco Central anunció la “tercera etapa” del plan económico
Luego de que el INDEC publicara el dato de inflación del 2,7% en diciembre de 2024, el BCRA estableció un nuevo sendero de desplazamiento de 1% mensual para el tipo de cambio, comenzando el 1° de febrero de 2025.
La decisión del Directorio de reducir a la mitad el ritmo de devaluación, que pasará del 2% al 1% mensual, se fundamenta en la consolidación observada en la trayectoria a la baja de la inflación y en las expectativas.
Según nuevas proyecciones de consultoras y bancos se espera que el dato de inflación de enero sea de 2,2% mensual y que recién en el mes de abril pueda estar por debajo del 2% (1,9%).
En sintonía con estos datos, el BCRA también dispuso a partir del 1 de febrero una nueva baja de la tasa de política monetaria de 32% a 29% de TNA.
Y si bien las tasas bancarias quedan a criterio de cada banco, rondaran ese valor de referencia. En el caso de los depósitos en pesos a 30 días la tasa promedio de los bancos privados para clientes es del 25% anual.
Etapa 1 del programa de estabilización
Consistió en la eliminación del déficit fiscal y el déficit cuasi fiscal del BCRA que resulta del pago de los intereses que devengan los pasivos remunerados.
Etapa 2
Iniciada en julio de 2024, se enfocó en lograr la «emisión cero» del Banco Central y en mantener una tasa de devaluación del peso frente al dólar del 2% mensual.
Etapa 3
Se reduce, a partir del 1º de febrero de 2025, la tasa de devaluación del peso al 1% mensual como consecuencia de la baja sostenida de la inflación.
Fuente: Departamento de Economía FECOI
Impacto en las empresas
En un escenario económico en el que la inflación registró variaciones mensuales menores al 3% en los últimos tres meses del año se proyecta la mejora del ingreso real de las familias y una recomposición del consumo . Durante el año pasado, los salarios privados formales crecieron en promedio 147,5%, superando a la inflación del 117,8%, según INDEC.
La baja de la tasa de referencia del BCRA podría verse reflejado positivamente en el costo del crédito con menores tasas para el financiamiento del consumo y préstamos para pymes.
Y por último, si bien se espera que el recorte en la tasa de devaluación contribuya a bajar las expectativas de inflación al funcionar como un ancla inflacionaria y a aumentar los salarios medidos en dólares, la apreciación de la moneda reduce la rentabilidad de los bienes argentinos orientados al mercado externo y abarata el acceso a producto importados generando dificultades en la competencia local e internacional.